Un santuario centenario

Uno de los puntos más interesantes de Bolonia es el Santuario de Nuestra Señora de San Luca, construido en el año 1194, aunque fue sufriendo numerosas reformas y transformaciones. Algunas reconstrucciones se llevaron a cabo por los daños sufridos en su estructura, otras por agradecimiento a hechos puntuales.

Una de estas reconstrucciones se realizó porque según se cuenta, la imagen de una Madonna en procesión consiguió detener las lluvias que asolaban la comarca, y por ello se amplió el Santuario como agradecimiento.

Cabe destacar que todos los sábados precedentes al quinto domingo después de Pascua se realiza la celebración de la Madonna, en la que podremos ver el descenso de la imagen hacia Bolonia en una de las procesiones más populares de la zona.

También podemos aprovechar para visitar el santuario cualquier otro día del año, pero cabe destacar que la cuesta es realmente pronunciada y larga, lo que le ha valido para ser etapa del Giro d’Italia varias veces, pero el esfuerzo merece la pena.