Además de contar con unas ciudades absolutamente espectaculares, Francia puede presumir, al igual que lo hace España, de poseer un gran número de pueblos bellísimos y con mucho encanto diseminados por toda su geografía. El que les presentamos hoy es Barfleur, un pintoresco puerto pesquero en Normandía.
Sus casas de granito le dan un aspecto totalmente diferente a este pueblo, haciéndolo destacar junto a su puerto, que es uno de esos lugares mágicos que parecen irreales hasta que los pisamos por nosotros mismos. Gracias a su costa, Barfleur se ha convertido no solo en un gran destino turístico de sol y playa, sino también en uno de los mejores pueblos para comer marisco de toda Francia, que se dice pronto.
La encantadora iglesia, los monumentos salpicados por las empedradas calles, y el encanto de escuchar en todo momento las olas y de sentirlas en nuestra nariz es lo que hace de Barfleur un pueblo imprescindible a visitar si estamos por esta zona del país.