Pasar el verano en La Mancha no es precisamente el plan más espectacular a priori. El calor que se puede alcanzar en esta parte de la península no tiene nada que envidiar al de las zonas más calurosas del sur, y la lejanía de las playas es también un contrapunto importante… salvo que nos apetezca darnos un chapuzón en alguna de las playas artificiales de la región. Si hay una que es especialmente popular, es es la de Lagunas de Ruidera.
Ubicada dentro del Parque Natural del mismo nombre, la playa artificial de Lagunas de Ruidera se ha convertido en una de las más espectaculares de todo el país, hasta el punto de obtener la bandera azul, certificación exclusiva de las mejores playas de nuestra geografía. Aquí podemos encontrar arena, un agua muy cálida y limpia y sobre todo, mucha naturaleza rodeando todo este complejo, que vale mucho la pena visitar.
Ubicado entre Ciudad Real y Albacete, este entorno natural es uno de los más espectaculares de la meseta española, una alternativa magnífica para un día de playa, pero también para hacer algún camino o sendero interesante por las cercanías, conociendo la variedad de flora y fauna del lugar. Para que luego digan que La Mancha no tiene playa…