Stonehenge, es un pequeño rincón alejado de las grandes aglomeraciones, y con un espectacular paisaje que no te puedes perder. Este increíble lugar, situado a tan solo una hora y media de la grandiosa ciudad de Londres, nos permitirá contemplar un monumento megalítico de la Edad de Bronce. Se ignora la razón por la cuál, estos grandes monumentos de piedra fueron construidos aunque se cree que en su momento, fue un templo religioso.
Lo más impactante de este pequeño lugar, es la imagen que nos regala al atardecer, algo fascinante, digno de observar y por lo que merece la pena acercarse para contemplarlo.
CÓMO LLEGAR
Desde la estación de tren de Waterloo en Londres, coges un tren dirección a Salisbury y una vez llegado a este pueblo, hay una parada de autobús junto a la estación que te lleva directamente hasta Stonehenge aunque hay que tener en cuenta, que los domingos no hay trenes directos desde Waterloo hasta Salisbury. Este trayecto cuesta más o menos unas 35 libras en total, sumando la ida y la vuelta, no es muy caro así que no perdáis la oportunidad de ir si tenéis la ocasión.
Las mejores horas para visitarlo son sin lugar a dudas, el amanecer y el crepúsculo.