Muy, muy al norte hay que viajar para llegar a la ciudad de Tromso, ubicada en la parte más septentrional de Noruega, y conocida sobre todo como destino turístico de aquellos que buscan desesperadadamente encontrar unas buenas auroras boreales. Y es que aquí, en esta ciudad, el espectáculos de las luces del norte es absolutamente espectacular.

Para disfrutar de él, lo mejor es acudir en la mitad del año más fría, de Octubre a Marzo, cuando las noches son casi eternas en esta zona del mundo y las posibilidades de ver las auroras aumentan muchísimo. Eso sí, no es lo único interesante de Tromso. Se trata de una ciudad pequeña, pero encantadora, con numerosas iglesias e incluso un par de catedrales imponentes (la del Ártico es muy conocida por su curioso diseño).

El puente que une la ciudad con el resto del país (ya que se encuentra en una isla) o el centro de la población, lleno de tiendas artesanales y tabernas donde parar a disfrutar de una buena cerveza tradicional, son otros de los atractivos de este lugar, perfecto para los cazadores de auroras boreales. Eso sí, no olvidéis abrigaros muy bien, porque hace mucho, pero que mucho frío.